As I lay in bed tonight, the 4th of July, I can hear the popping of fireworks, and the song written by John Rutter performed by the Tabernacle Choir at Temple Square, and can’t help but feel the Spirit of God.
I feel the Spirit urging me to remember the great sacrifices made by my grandfather and many of his young friends. He would say “They gave their tomorrow’s so we could have our today’s.” And would remind us never to forget it.
I feel the Spirit remind me that we are the product of so much sacrifice “They the builders of the nation!”.
I feel an urgency to teach my children that the Constitution, along with other founding documents of this United States were inspired by God and founded on His principles of righteousness.
I feel inspired to be a better daughter, mother, sister, friend, neighbor & citizen.
He whispers to me that there is nothing to fear, that God is on our side and on the side of those who fight for what is great and good in this country- this world.
“Distant Land (A prayer for freedom)" by John Rutter (below)
"I see a distant land: it shines so clear. Sometimes it seems so far, sometimes so near. Come, join together, take the dusty road; Help one another: share the heavy load. The journey may be long: no end in sight: There may be hills to climb, or giants to fight: But if you’ll take my hand, We’ll walk together toward the land of freedom, freedom, freedom.
I hear a distant song: it fills the air. I hear it, deep and strong, rise up in prayer: ‘O Lord, we are many; help us to be one. Heal our divisions: let thy will be done.’ I know the time will come when war must cease: A time of truth and love, a time of peace. The people cry, ‘How long? Till all our world can join the song of freedom, freedom.
I touch a distant hand and feel its glow, The hand I hoped was there: at last I know. Swords into ploughshares: can it all be true? Friends out of strangers: start with me and you. I see another time, another place Where we can all be one, one human race. The walls will melt away, We’ll come together on the day of freedom, freedom, freedom.”
-Jennifer Webb
Traducir por El Hno NEVille
Mientras estoy en la cama esta noche, el 4 de julio, puedo escuchar el estallido de los fuegos artificiales y la canción escrita por John Rutter interpretada por el Coro del Tabernáculo en la Manzana del Templo, y no puedo evitar sentir el Espíritu de Dios.
Siento que el Espíritu me impulsa a recordar los grandes sacrificios que hicieron mi abuelo y muchos de sus jóvenes amigos. Él decía: "Ellos dieron su mañana para que pudiéramos tener el de hoy". Y nos recordaría que nunca lo olvidemos.
Siento que el Espíritu me recuerda que somos el producto de tanto sacrificio "¡Ellos los constructores de la nación!".
Siento la urgencia de enseñar a mis hijos que la Constitución, junto con otros documentos fundacionales de este Estados Unidos, fueron inspirados por Dios y fundamentados en Sus principios de rectitud.
Me siento inspirada a ser una mejor hija, madre, hermana, amiga, vecina y ciudadana.
Me susurra que no hay nada que temer, que Dios está de nuestro lado y del lado de aquellos que luchan por lo que es grande y bueno en este país, este mundo.
"Distant Land (Una oración por la libertad)" por John Rutter (abajo)
"Veo una tierra lejana: brilla tan clara. A veces parece tan lejana, a veces tan cercana. Venid, únanse, emprendan el camino polvoriento; Ayúdense unos a otros: compartan la pesada carga. El viaje puede ser largo: sin fin en Vista: Puede que haya colinas que escalar o gigantes que luchar: pero si me tomas de la mano, caminaremos juntos hacia la tierra de la libertad, la libertad, la libertad.
Escucho una canción lejana: llena el aire. Lo oigo, profundo y fuerte, me levanto en oración: “Oh Señor, somos muchos; ayúdanos a ser uno. Sana nuestras divisiones: que se haga tu voluntad '. Sé que llegará el momento en que la guerra debe cesar: un tiempo de verdad y amor, un tiempo de paz. La gente grita: "¿Hasta cuándo? Hasta que todo nuestro mundo pueda unirse al canto de la libertad, la libertad.
Toco una mano distante y siento su brillo. La mano que esperaba que estuviera allí: por fin lo sé. Espadas en rejas de arado: ¿puede ser todo verdad? Amigos de extraños: comiencen conmigo y con ustedes. Veo otro tiempo, otro lugar donde todos podemos ser uno, una sola raza humana. Las paredes se derretirán, nos uniremos en el día de la libertad, la libertad, la libertad ".
-Jennifer Webb
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